Antes de empezar a escribir esta entrada, una puntualización. Si estás leyendo esto porque piensas viajar a Shangai, revisa el año en el que estas. Y si es 2009… NO LO HAGAS. Sin embargo, si tu calendario marca Mayo del 2010. Estás de suerte… Probablemente estés a punto de ir a una de las ciudades más espectaculares del mundo. La razón del cambio es muy simple. A partir de Mayo del 2010, Shangai acogerá una exposición universal, y actualmente se encuentra completamente levantada para adecuar la ciudad al evento. Así que mi recomendación es que esperes a que cambie el año para ir. Y dicho esto…
Viernes 10 de Julio.
Partimos del aeropuerto nacional de Taipei (manda huevos!!!) en vuelo directo a Shangai. El vuelo directo no lleva más de hora y media y cuando nos queremos dar cuenta ya hemos aterrizado en china continental. No nos dejan levantarnos del avión, hasta que vemos entrar a uno tíos disfrazados de blanco con un láser rojo en la mano… Resulta que al llegar a China, se les mide la temperatura a todos los pasajeros con una pistola láser por si tienes fiebre… Y si la tienes, ala!! Cuarentena y a ver si tienes gripe A. Una vez que lo sabes resulta hasta gracioso, pero la primera vez, impresiona ver entrar a los tipos vestidos de blanco como si fuese la película de ET el extraterrestre.
El aeropuerto de Shangai (Pudong) es bastante grande pero muy bien preparado. Las distancias y las esperas (control de pasaportes…) se hacen cortas. Supongo que estará pensado para acoger a la gente que visite la EXPO, pero realmente ahora les sobra espacio. De la salida a la estación del MagLev, 10 minutos.
El MagLev es el tren más rápido del mundo. Capaz de alcanzar los 450 km por hora (El máximo con nosotros a bordo fue 431 kph). Recorre los 30 Km. que separan el aeropuerto de la ciudad en menos de 8 minutos. Cuando llegas a la ciudad coges el metro, y en otros 15 minutos en Nanjing East Road, nuestra parada de metro.
Llegamos al hotel, y llamamos a David, el informático de Shangai que nos llevo a cenar al “Captain’s bar”. El restaurante de un hostal con unas vistas privilegiadas de los rascacielos de Shangai.
La pena fue que al día siguiente teníamos que madrugar muuuucho, y después de la cena nos fuimos de vuelta al hotel.
Sábado 11 de Julio.
Nos levantamos pronto que a las 7:20 aterrizaban los padres de María. Otra vez metro, MagLev, MagLev, metro y a comer jamón recién traído de España mientras deshacían la maleta. Casi un año sin probarlo!!! Una vez situados, nos fuimos a la zona de los rascacielos, a la torre SFC (la 2ª torre más alta del mundo - de 492 metros), al restaurante del hotel Hyatt de la planta 91 a tomar unas cervezas.
Después de dar una vuelta por la zona, comimos en un restaurante japonés de uno de los mil centros comerciales que debe haber por la ciudad (quien dijo país comunista??).
Cruzamos de nuevo hacia la zona del Bund, por un “túnel-espectáculo” que la gente se harto de NO recomendarnos… qué razón tenían!!! Una orgía de luces que duró 3 o 4 minutos por la que pagamos 4 euros por persona.
Del otro lado, las obras nos fastidiaron el paseo vespertino (por la tarde) y al atardecer compramos unos tickets para un “mini crucero” por el río que cruza Shangai, el Yantse.
Allí pudimos volver a ver los rascacielos, pero esta vez iluminados.
Al terminar nos fuimos a cenar al mismo sitio en el que habíamos estado la noche anterior con David , y de ahí a dormir, que los padres de María llevaban más de 30 horas sin dormir.
Domingo 12 de Julio.
Un poco hartos de rascacielos, desayunamos y nos fuimos a conocer el Old Town. Construcciones antiguas, mucho más chinas, que nos hacían sentir por fin en ese país al que habíamos ido: China.
Allí visitamos los jardines Yuan……
Después de los jardines y compras de rigor, llego la hora de comer. Encontramos un puesto y compramos de todo: croquetas de gambas, rollitos primavera, cangrejos rebozados (que se comían enteros… si, si, con cáscara y todo), y unos pajarillos que no nos quedo muy claro de que raza serían.
Cogimos un taxi que nos llevó hasta Huangpu park, donde se encuentra People´s Square.
En ese mismo parque se pueden visitar también los museos de Arte Contemporáneo (MOCA) y el del Plan Urbanístico de Shangai, que fue al que fuimos nosotros.
La verdad es que más que un museo es una exhibición con un montón de maquetas y simuladores de cómo era Shangai en los años 30 y como es actualmente. Mejor aún… como va a ser el año que viene, con las obras de la EXPO terminadas.
Al salir del museo nos encontramos con algunas atracciones, y ni cortos ni perezosos, nos subimos a las clásicas sillas voladoras.
Después nos fuimos al hotel a descansar un poco y a dar buena cuenta del jamón que nos quedaba, antes de irnos por la noche a la zona de la French Concession, donde vimos la casa donde se celebró el primer Congreso de la historia del Partido Comunista Chino , y donde cenamos en un restaurante llamado Latina, buffet de carne de los de “all you can eat” recomendación de unos amigos de Taipei.
Lunes 13 de Julio
Después de hacer las maletas y dejarlas en el hotel aprovechamos la mañana para irnos a la zona oeste de la calle Nanjing Road, a hacer compras. Pero no de tiendecillas. Realmente , fuimos a un centro comercial… de falsificaciones!!!
Y con las mochilas llenas y el bolsillo un poco más vacío a la segunda etapa del viaje… XI´AN!!
Os dejo un slide con fotos curiosas de Shangai...
1 comentarios:
Hola David,
Me encantó tu relato del viaje por Shanghai! Después de leerlo, sumado a las recomendaciones de Martín, debo admitir sin dudas que tenemos que ir!
Saludos!
Laura (la argentina)
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